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Descubren Isabel Kraut

Publicado por LCI Education - 13 de octubre de 2016


 

Graduada de Inter-Dec College, Isabel Kraut es una maquilladora y una experta de la venta al por menor de cosméticos. Ahora, es propietaria de Bel Cosmétiques, una nueva tienda del barrio Outremont en Montreal. Una mujer ambiciosa y un ejemplo a seguir!


¿Ya lleva 7 años en el ámbito de la belleza, ¿cómo descubrió su pasión por el maquillaje y los cosméticos?

Cuando era adolescente me encantaba el maquillaje y era una «entendida en belleza». A los 17 años empecé mi primer trabajo en la industria cosmética para la marca Shiseido en The Bay, sin ninguna formación o experiencia previa en cosmética aparte de mi pasión innata por la belleza. Trabajé en el mostrador de Shiseido durante 1 año, en el cual aprendí mucho de mis compañeros y de la marca sobre productos de belleza de lujo, además del cuidado de la piel y del maquillaje. Al año siguiente, trabajé con Shiseido Canadá como asesora de belleza local de asistencia de ventas visitando distribuidores de productos de belleza por todo Quebec. A lo largo de mi experiencia, me sentía especialmente atraída por el maquillaje y su mundo, desde los colores, las texturas, la capacidad de transformar y las infinitas posibilidades creativas que presentaba. Fue a partir de ese momento cuando sentí la necesidad de aprender maquillaje profesional con el fin de ampliar mis horizontes.


Está titulada por el Inter-Dec College en Maquillaje Artístico de moda y belleza (Maquillage artistique mode et beauté), ¿Qué le aportó su curso de formación?

Cuando decidí que iba a obtener un título en maquillaje, investigué diversas instituciones locales cuidadosa y meticulosamente. Inter-Dec College se destacó entre las demás opciones, ya que era sin duda la de mejor reputación y ofrecía el programa de estudios más completo, con el atractivo añadido del «proyecto de portafolios» de final de curso. La experiencia fue realmente gratificante y memorable de principio a fin. Tuve mucha suerte de tener un profesor increíble, el Sr. Philippe Gingras, quien además de sus años de experiencia como artista y su atención al detalle, siempre era sincero y franco con sus estudiantes en cuanto a la calidad de su trabajo y su progreso. El programa en sí abarca todo lo que un aspirante a artista necesita saber, desde la importancia de la iluminación, los colores, las formas oculares y faciales, los productos y herramientas, la historia y las tendencias e incluso recomendaciones sobre cómo iniciarse en el maquillaje de forma profesional después de terminar el programa. Me encantaba especialmente el proyecto de portafolios, ya que era una oportunidad inmediata para aplicar lo que habíamos aprendido y crear algo realmente único e impactante para presentar a futuros clientes y empleadores. También me dieron el premio al «mejor portafolios» en mi curso, después del cual tuve la maravillosa oportunidad de hacer una sesión fotográfica temática adicional de alta costura con Colombe Photographe. Esos 3 meses de escuela de maquillaje fueron la mejor educación que he tenido y no te imaginas cuántas veces me gustaría poder volver atrás y hacer todo de nuevo. 




Trabajó para spas y, especialmente, para la marca Sephora, ¿qué se llevó de esas experiencias?

Después de trabajar con Shiseido, tuve la oportunidad de trabajar para varios distribuidores y proveedores de servicios de belleza, como Jean Coutu Cosmétiques, MUSST, Avanti le spa y Makeup Forever Canadá en Sephora St-Catherine, además de trabajar como autónoma, claro. Cada experiencia fue tan diferente, pero todas igualmente beneficiosas y enriquecedoras a su manera. Me hice experta en ventas y atención al cliente, además de ampliar conocimientos sobre productos de una gama muy amplia de marcas de cosméticos, tanto comerciales, profesionales como de lujo. Mientras trabajaba como artista de maquillaje en el spa más importante de Montreal, llegué a observar y a trabajar junto a muchos artistas talentosos, que contribuyeron enormemente a mejorar mi técnica y aplicaciones. Trabajar en la boutique de Sephora Make Up For Ever fue una experiencia especialmente gratificante ya que es una marca de gran reputación en la comunidad de artistas de todo el mundo. Estar vinculada a MUFE fue un gran logro, ya que llegué a trabajar con un equipo increíble y con productos igualmente sorprendentes. Es una marca que está constantemente superando los límites de la creatividad, además de poner un énfasis especial en la educación de sus artistas y nutrir su crecimiento artístico. Estar inmersa en la atmósfera de Sephora también me permitió ganar una valiosa experiencia en ventas, así como una gran cantidad de información sobre marcas y productos de la competencia. 


¿El pasado mes de abril lanzó su empresa Bel Cosmétiques, ¿puede darnos más detalles sobre este tema?

Al enterarme con unos meses de antelación de que la boutique de Makeup Forever iba a cerrar, tuve que comenzar a dirigir mis esfuerzos hacia la búsqueda de una nueva oportunidad. Si bien estaba contenta de seguir trabajando como autónoma con mi clientela en crecimiento, también quería tener algo que me ofreciese más estabilidad y flexibilidad que un simple «curro de vendedora». Durante muchos años había pensado en vender mis propios productos, además de ofrecer servicios de maquillaje. Lo intenté en Avon, Arbonne, y otras marcas de «venta directa», pero rápidamente descubrí que aquello no era para mí. Así que empecé a investigar y probar diferentes productos y marcas, a la caza de una gama de productos de alto nivel con la que poder trabajar y revender a mis clientes con seguridad. Mientras tanto, yo había estado trabajando como una artista de maquillaje «de guardia» para Van Hill Spa, un exquisito establecimiento de propiedad familiar en Outremont que ofrece una amplia gama de servicios estéticos a una cartera de fieles clientes desde hacía muchos años. Ya que el maquillaje es uno de esos servicios de belleza que es más ocasional y menos buscado que, por ejemplo, la manicura o la depilación, mi presencia en el spa como artista de guardia no era constante. Eso me hizo pensar, ¿qué podía hacer para conseguir una presencia más habitual en una zona privilegiada? De esta idea nació la boutique «Bel Cosmétiques», un espacio que vende una gama única de marcas de cosméticos, tanto locales como internacionales, además de ofrecer servicios de maquillaje tales como aplicaciones, servicios a domicilio, lecciones y pestañas postizas temporales. Estoy orgullosa de ofrecer marcas como FACE Atelier, Veil Cosmetics, Amaterasu Beauty, Kaia Naturals, Beauty Blender, Sara Happ, Trust fund Beauty, Girlactik, Lisa Noto, Xtreme lashes y por supuesto, «la marca de la casa», Bel Cosmétiques, muchos de los cuales también son canadienses.




En calidad de joven emprendedora, ¿dónde se ve dentro de diez años?

Nuestros objetivos a largo plazo incluyen establecer una página web de venta exitosa, la expansión de nuestra gama de productos y marca cada vez a mayor nivel, representar y distribuir marcas de cosméticos, ampliar nuestra gama de servicios relacionados con la belleza y por supuesto, convertirnos en el establecimiento más buscado de la ciudad tanto para los servicios de maquillaje como para las marcas de belleza independientes.


Su inicio de carrera ha tenido mucho éxito, ¿qué consejos daría a nuestros jóvenes estudiantes de belleza?

Nunca dejes de aprender, crear, crecer. Al empezar, aférrate a cada oportunidad. No te desanimes ni te sientas fracasada si las cosas empiezan lentamente o no llega tu «trabajo ideal» inmediatamente. ¡Rodéate de personas de las que puedas APRENDER! En el maquillaje, nunca dejes de inspirarte por los que te rodean. Instagram y YouTube son herramientas útiles pero no deben ser los únicos puntos de referencia. Ponte a prueba, practica, toma la iniciativa, sé proactiva. Colabora e intercambia servicios con otros aspirantes a profesionales de sectores afines. Si eres persistente, ambiciosa y apasionada del maquillaje, comprobarás que las oportunidades son infinitas.